Blogia
Punto de fuga digital

Las flechas de Cupido

Hay una película de cine que no recuerdo el título, entre otras cosas porque la vi en TV hace años y me aburrió, en la que la protagonista dice: "Cada tres años, me enamoro, me caso y tengo hijos". Como si el enamoramiento fuera una fatalidad que sólo tuviera un destino, el matrimonio, y éste una única función, satisfacerlo. Nada menos natural que la monogamia o el amor eterno. Todo, incluido el sexo, es una creación cultural, del instinto sólo nos queda el impulso.

Desde adolescentes se nos enseña que Cupido nos elige a nosotros, no nosotros a él, como diría Karina con esas flechas que van contigo a donde quiera que tú vas; aunque con los años se vuelven menos viajeras. Es muy común gustar de fantasías de "amores puros", es decir, sin comas ni peros, y eso también lleva a separaciones sin comas ni peros. La pureza está reñida con el tiempo, y no confundir el amor con el enamoramiento.

La fisiología ahora nos asegura que todo enamoramiento tiene fecha de caducidad, sin discusión, lo que funciona luego es el apego. Yo añadiría que la inteligencia también tiene que ver en este proceso: saber ser diferente, aceptar que se cambia y disfrutar de ello sin miedo.

Hacer del amor algo convencional de normas universales es un error (no hay dos iguales ni más reglas que las propias), tanto como tomar posesión o presuponer que sabemos más de él, que él o ella de sí misma, no hay cosa que nos baje más la autoestima que nos consideren del todo previsibles. A nadie que nos sea cercano desconocemos más que a nuestra pareja, en parte porque el desconocimiento se agranda con el tiempo.

La seducción alimenta al apego y a la pasión: no está prohibido enamorarse de vez en cuando de la misma persona. La infravaloración mata a ambas. Aunque al final siempre nos quedaría el miedo al desamparo o la espera a que cupido nos traiga unas nuevas flechas.

2 comentarios

Miguel -

Siempre hay una parte que se siente abandonada, aun haya mutuo acuerdo.

Evita -

Maravillosa circunsantancia la ruptura común, alivio en ambas partes..liberación mutua.
Difícil y agobiante cuando solo una de las partes da todo por pérdido y no tiene el valor de confesarlo a la otra..

" 01.- VIVIR DE LO VIVIDO (Canción inédita)

Cómo vivir cuando de amor se está muriendo
Cómo luchar contra sí mismo en la batalla
Cómo decirle al corazón, ¿qué estás haciendo?
Que de mi vida yo no quiero que se vaya y por tu culpa
Corazón lo estoy perdiendo, lo estoy perdiendo

Cómo decirle que al tocarlo ya no tiemblo
Que su caricia en mi caricia ya no manda
Cómo contarle que lo que por él yo siento
Es el dolor de lo vivido, la pasión de la nostalgia
Y una carta que de olvido, con un te quiero se calla

Y vivir de lo vivido y si no morir
Y encerrarse en el olvido y no salir de allí
Y entender que por ti vivo, que sin ti no sé vivir
Que sin tu aliento estoy perdida y no sé regresar sin ti

Y vivir de lo vivido o sobrevivir
Y enterrarse en lo perdido y no querer salir
Y sentir que por ti vivo, que sin ti no sé vivir
Que sin tu aliento estoy dormida y no sé despertar sin ti

Cómo vivir cuando de amor se está muriendo
Cómo luchar contra sí mismo en la batalla
Cómo decirle al corazón, ¿qué estás haciendo?
Que su calor tapó mi frío, que su cuerpo fue mi manta
Que de su dolor me río, que por tu culpa se acaba

Y vivir de lo vivido o sobrevivir..

Materia Prima/Pasión Vega.2004.